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Fundación Pau Casals frente a la Playa de Sant Salvador-El Vendrell


Quiero dar las gracias a todas las personas que han hecho posible que el tiempo no sólo retroceda, sino que lo haga para revitalizarnos, así fue nada más entrar en su casa.



                                             Libertad y Naturalidad.


  Todo ello con virtuosidad.


                                                     
                                         
                                       Su correspondida correspondencia si antes fue sorprendente hoy es, extraordinaria.


                              



No imaginé, ni siquiera soñé conscientemente mientras deambulaba por las estancias de su casa que lo siguiente me estremecería tanto...


Al verlo sentí que parte de su alma permanece aquí y lo evidencié no sólo delante de su otra mitad sino unos segundos después. Cuando la presencia de su violonchelo me traspasó con su indivisible espera, milagrosamente el audio, se puso en marcha. 




Escuchando a Pau Casals tengo una sensación de sublimación, especialmente con la Suite de Bach número uno y la naturaleza humana.  Puedo escucharla mil veces y no me causa otra sensación.

Para despedirme, os dejo con unas palabras de Emerson las cuales transcribo de un librito de Thoreau que os recomiendo antes o después que Walden. Hablo de "Caminar", traducido por Marina Espasa pero que como ella, evitaré traducir lo siguiente:

 "Wherever there is knowledge, wherever there is virtue, wherever there is beauty, he will find a home".


Comentarios

Tot Barcelona ha dicho que…
Gracias por la recomendación, GEMMA, y por esta página que da calma ante tanta vorágine.
Salut
Gemma ha dicho que…
La vorágine sólo conseguirá una cosa, que huyamos de ella. Gracias a ti por descubrirme cosas de Barcelona y a personas recónditas. Un abrazo.
Francesc Puigcarbó ha dicho que…
"Allà on hi hagi coneixement, allà on hi hagi virtut, allà on hi hagi bellesa, trobaras una llar".

salut
Daniel F. ha dicho que…
En Burgos hay una calle dedicada a este músico, la verdad es que desconozco su obra (como otras muchas), pero si se que las personas dejamos un rastro donde vivimos, no se describirlo, pero se que existe..

Un saludo
Gemma ha dicho que…
Gràcies, Francesc. Ho vaig trobar molt simple,bonic i sincer. En el fons una casa té molt d,això.
Gemma ha dicho que…
No lo sabía Daniel, el nombre de una calle te puede llevar a descubrir el personaje desde luego. Me pasó con Enrique Granados y alguna mas. Aunque no puedas explicarlo, de hecho yo tampoco, creo que entiendo lo que quieres decir. Gracias por pasarte.

Francesc Cornadó ha dicho que…
Querida Gemma.
Pau Casals, en mi opinión, hizo una recreación de las suites para violonchelo solo de J.B. Bach.
Ya hace tiempo que sospecho que las seis suites no fueron escritas originariamente para violonchelo y que fue Pau Casals quien las transpuso o adaptó para su instrumento.
Sabemos que muchas de las obras de Johann Sebastian Bach carecían de indicación respecto a la instrumentación, que muchas veces se limitaba a indicar un conjunto instrumental sin especificar el número de instrumentos y que en muchas ocasiones sus obras son experimentos para ser interpretados con una formación musical u otra, según la disponibilidad del momento.
He pensado que las suites para violonchelo fueron escritas también como un experimento sobre un timbre de cuerdas graves, o algo afinado a quintas que podía parecerse a un violonchelo. En estas suites nos encontramos con afinaciones diferentes a la natural del violonchelo que es: do, la, re, sol.
No pienso en la viola da gamba, aunque Bach fuera un notable violagambista, pues la resonancia y brillo de las suites no concuerda con la sutil morbidez de la viola da gamba.
En la suite número 5 (BWV.1011) en do menor nos encontramos que el instrumento debe afinarse a sol, re, sol, do, lográndose de esta manera unas resonancias que un violonchelo, en su afinación natural, no consigue. Se trata de una suite para ser tocada con un violonchelo “scordato”, esto es una forma diferente de la habitual, afinando la primera cuerda (la) un tono por debajo de lo normal (sol). Total, un experimento, nada raro, pero experimento, al fin y al cabo.
Por otra parte, la suite número 6 (BWV.1012) está escrita para un instrumento de cinco cuerdas que durante mucho tiempo fue descrito como si fuera la "viola pomposa", y cuya invención se atribuía sin razón a Bach. Más aguda que las otras cinco suites, sin duda ésta fue pensada para un violonchelo piccolo de cinco cuerdas (de aguda a grave: Mi, La, Re, Sol, Do). Esta suite es la más difícil de tocar en un violonchelo normal. Otro experimento.
No existe manuscrito autógrafo de estas suites, sino varias copias debidas a Anna Magdalena, segunda esposa de Johann Sebastian, a Westphall y a Johann Peter Kellner, organista y amigo de Bach.
Y aunque es habitual creer que Bach compusiera estas obras para dos violonchelistas de la orquesta de la corte de Cöthen: Bernard Linigke y Karl Ferdinand Abel, me cuesta creer que las suites fueran composiciones originarias destinadas a violonchelo.
Pues bien, sean experimentos o invenciones para cuerdas graves, el caso es que Pau Casals las ordenó y nos mostró con absoluta maestría este monumento sonoro.
Bendita adaptación la de estas suites que tanto admiro y que me han proporcionado momentos de verdadero goce estético.
Un abrazo
Francesc Cornadó
Francesc Cornadó ha dicho que…
Querida Gemma, cuando he dicho que Casals hizo una recreación de las suites de Bach, he olvidado poner un adjetivo, debía decir: "Casals hizo una MAGNÍFICA recreación de las suites de Bach.
Un fuerte abrazo
Francesc Cornadó
Gemma ha dicho que…
Querido Francesc,

Nuestro admirado Pau Casals, se crió en casa de un músico, que era su padre, con lo cual, muy probablemente aprendió a escuchar música antes que a hablar. A los seis años compuso su primera pieza y a los catorce descubrió en una librería de Barcelona las seis suites de Bach.

Unos años antes de este descubrimiento le pidió a su padre que le comprara un violonchelo y éste le dijo que en casa ya tenían muchos instrumentos por lo que antes de los catorce años, Pau Casals ya usó otros instrumentos e innovó y experimentó con ellos con el fin de que sonaran como su inalcanzable violochelo.

Fue un vecino suyo quien le hizo su primer instrumento con una calabaza y unas cuerdas que también ví en la fundación, date cuenta que ese fue ya su primer violonchelo.

Lo que hizo después cuando por fin tuvo su violonchelo y tras descubrir en esa librería de Barcelona las seis suites de Bach fue reinterpretarlas con su instrumento, y estoy convencida que él también pensaba que Johan Sebastián Bach no las hizo para violonchelo pero simplemente Pau Casals las iba a tocar con su instrumento. Se lo debía a Bach, esto no iba a ser una imitación entre músicos ni un homenaje, esto era demostrar que sus Suites eran instrumentalmente universales.

Si en su infancia tuvo que emular el violonchelo con otros instrumentos, en su estrellato violonchelista le descubriría al mundo que las seis suites de Bach se podían tocar con su antes inalcanzable violonchelo.

Y lo hizo y otros lo imitaron a él después. Pau Casals sentía la música desde dentro y como un idioma más sabía que si lograba hacerlo en germánico además de en latín, lo entenderían de una forma universal, es una pequeña analogía del vocabulario en música pero más allá de la partitura estaba su carácter innovador desde que era un infante, gracias todo hay que decirlo a la negativa de su padre, osea que la carencia en no pocas ocasiones despierta el ingenio.

Es un personaje interesantísimo y si yo disfruto escuchándolo, personas como tú con más conocimiento musical que yo lo tenéis que alucinar en su técnica. Algún día llegaré a esto tuyo, me lo prometo a mí misma y espero poder agradecerte entonces más de lo que lo hago hoy, tu gentil e inspirador comentario. Un fuerte abrazo.